Días atrás, un sábado, llegué temprano de Buenos Aires, dejé el bolso y salí rápido para el Poli a ver por primera vez este año las inferiores de Garré, que ese día recibían a Jorge Newbery. Vi casi todo el partido de la Sexta, que ganó 4-1, y el de la Quinta, que venció 3-2 en un final muy emotivo (ganaba 2-0, le empataron y en los últimos minutos “Saconi” Moralejo metió el tercer gol), y me fui muy conforme con lo que ambas divisiones ofrecieron, más allá de los resultados.
Aunque varios de ellos ya no son niños, el título de la columna (a la inversa de lo que canta Serrat) sirve para expresar la sensación que me quedó después de esa tarde de sábado y como mensaje para los chicos. Sigan jugando tan bien como frente a Newbery, sigan haciendo que valga la pena ir a verlos.
Pueden tener partidos regulares o malos, seguro, y cometer errores inocentes porque todavía les queda mucho por aprender, pero resultó evidente que lo que ocurrió frente a Newbery, una potencia en divisiones menores, no fue casualidad. Así lo sostienen quienes los acompañan sábado tras sábado.
Jugadas seis fechas del Apertura las tres divisiones están invictas, con buenas chances de ser campeonas, y la gente habla cada vez más de ello, pero no hay que quedarse solamente con el detalle del invicto, porque nada debería cambiar una derrota si la propuesta en el campo de juego sigue siendo generosa. Además se trata de chicos, cuya prioridad es continuar formándose para ser jugadores de primera en un futuro no muy lejano.
Se han repartido afiches en el pueblo que invitan a apoyar a las inferiores en su próximo partido. Pero hay que ser cautos para no hacerles sentir obligación de ser campeones, porque les quedan por delante los rivales más difíciles y el campeón va a ser sólo uno, y a esa edad no conseguir el objetivo puede convertirse en una frustración muy difícil de asimilar.
En cambio, si finalmente logran el título el mérito será doble, por el logro en sí y por los medios utilizados para conseguirlo. No cambien, están en el camino correcto.
MILDU
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